a nadie le gusta la gente deprimida. hace unos meses me preguntaba si alguien allá en mi ciudad me extrañaba, y en el caso de que sí, cuándo se acordarían de mí? extrañar en portugués no es lo mismo que en castellano. saudade. esta palabra hermosa que me suena más como "soledad" que cualquier otra cosa. acordarse de alguién y hacerle presente por la fuerza de la memoria. en cuáles recuerdos todavía camino por las calles de belo horizonte? todas estas cuestiones me llevan a otra más: sobreviviré yo en santa fe por cuanto tiempo después que me vaya? de esto también se trata el arte: sobrevivir a la muerte por la fuerza del recuerdo.
jueves, 15 de noviembre de 2012
martes, 17 de julio de 2012
134 días
cómo te trata argentina? esta fue y sigue siendo una pregunta frecuente desde que llegué, el 7 de marzo, en tierras hermanas. y bien, les digo, encima porque decidi por quedarme, y hoy era la fecha de mi vuelo de regreso y serán cinco meses más acá.
en santa fe hace demasiado calor o demasiado frío, no hay espacio para el equilibrio, me parece. dos meses estuve encerrada en la habitación 14 de la RAE 1, calle 9 de julio, 2655. y ahora ya se fueron (casi) todos los que vivieron ahí conmigo y me veo por mi cuenta, de una manera distinta.
en santa fe hace demasiado calor o demasiado frío, no hay espacio para el equilibrio, me parece. dos meses estuve encerrada en la habitación 14 de la RAE 1, calle 9 de julio, 2655. y ahora ya se fueron (casi) todos los que vivieron ahí conmigo y me veo por mi cuenta, de una manera distinta.
tengo amigas, las brown sugar, a las que quizás extrañe más que actualmente extraño a los de mi ciudad, belo horizonte, éste rincón que nadie sabe ubicar en el mapa de brasil. entre san pablo y bahia, digo. y no, no hay playa, hay montañas, nada que ver con la llanura santafesina.
sé, desde hace un tiempo ya, que me despido de esto que se parece a un sueño despierto, que es vivir en ése país que ya quería antes de conocerlo. lo que sí es cierto es que estar acá de alguna forma me hace más dura. lo siento en las rodillas, el los abrazos, en las manos que tengo hinchadas y no sé que hacer. nunca lo supe.
sé, desde hace un tiempo ya, que me despido de esto que se parece a un sueño despierto, que es vivir en ése país que ya quería antes de conocerlo. lo que sí es cierto es que estar acá de alguna forma me hace más dura. lo siento en las rodillas, el los abrazos, en las manos que tengo hinchadas y no sé que hacer. nunca lo supe.
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